Anteayer estaba leyendo la cronología del Twitter, cuando me sorprendió una noticia que me dejó helada. Tuve que volver atrás otra vez para leerla de nuevo. Nelson Mandela se había ido. Sí, ya sé que tenía 95 años, pero creo que si no hubiera sido por los 27 años de cárcel estaría entre nosotros unos cuantos años más.
Para mi Madiba siempre ha tenido una influencia muy grande en mi vida. Su filosofía, su ética vital han sido parte de mi existencia.
Mandela veía a la gente como seres humanos, independientemente de su raza, sí, pero también de su situación monetaria, y otras muchas cosas. Porque miraba en el alma de los otros. Porque respetaba a alguien sólo por existir.
Y si a eso le añadimos su coraje, la fuerza que tenía en su interior, pues tenemos a uno de los hombres que más ha desarrollado su capacidad humana en estos tiempos difíciles para serlo.
Él siempre, a pesar de todo lo que pasó en su vida, por encima de todo el dolor, vejaciones e injusticias, se erguía de nuevo con más fuerza si cabe.
Por eso en la cárcel una de sus mayores inspiraciones fue el poema Invictus de William Ernest Henley, cuyos dos últimos versos dicen: "Soy el dueño de mi destino / soy el capitán de mi alma"
Gracias Madiba por seguir luchando por encima de todo por la convivencia de los seres humanos sean de la raza que sean. Por erradicar el Apartheid, aunque ahora las cosas no estén tan bien por Sudáfrica. Gracias por ser un gran ser humano que impresionó a gente humilde, a reyes, presidentes, músicos, en definitiva, al mundo entero, aunque muchos te consideraran un terrorista.
Gracias Madiba por ser un ejemplo en mi vida y en la de millones de vecinos de este planeta llamado Tierra. Gracias por inspirarme a ser como soy, a ser mejor humana cada día, por encima de lo que digan los demás, por encima de las injusticias que tanto me encienden. Gracias por ser un auténtico Hombre que dejó en silencio a muchos que se creían con la razón de la violencia, la falta de honestidad, y otras muchas cosas que sólo provocan heridas en el alma.
Intentaremos continuar con tu legado en cada rincón del mundo.
Te quiero Nelson Mandela.